Homogeneizador Industrial de Alta Presión para la Industria Alimenticia

Qué Hace: Aplica una presión controlada y elevada, forzando el producto a pasar por un espacio estrecho, generando alta turbulencia y cizallamiento.

Beneficio: Logra una reducción uniforme del tamaño de partículas, creando una emulsión estable y una textura homogénea en el producto final. Esto mejora la experiencia sensorial del consumidor y mantiene la calidad visual y frescura del producto durante toda su vida útil.

Qué Hace: Ajusta automáticamente el tamaño de las partículas en cada lote mediante sensores y sistemas de ajuste automático.

Beneficio: Evita la formación de grumos e inestabilidades, asegurando una distribución uniforme de ingredientes en toda la producción. Esto garantiza una calidad consistente entre lotes y una experiencia sensorial óptima para el consumidor.

Qué Hace: Permite adaptar el proceso de homogeneización según las características del producto, eligiendo entre una o dos etapas según la viscosidad, contenido de sólidos o necesidad de separación de fases.

Beneficio: Garantiza la estabilidad y calidad en productos complejos como yogures bajos en grasa o bebidas enriquecidas. La opción de usar dos etapas de homogeneización mejora la capacidad de separación de fases, extendiendo la vida útil del producto y asegurando una mezcla más homogénea y consistente.

Qué Hace: Utiliza componentes fabricados con acero inoxidable de alta calidad y recubrimientos de diamante sintético DLC para asegurar durabilidad y resistencia al desgaste.

Beneficio: Reduce significativamente la frecuencia de reemplazo de piezas críticas, disminuyendo los costos operativos y de mantenimiento. Esto asegura que el equipo funcione de manera óptima en entornos de alta producción y prolonga los intervalos entre servicios, evitando reemplazos constantes de piezas.

Qué Hace: Permite ajustar la capacidad de producción según las necesidades del lote, operando a una capacidad variable en lugar de una capacidad fija.

Beneficio: Ofrece una mayor flexibilidad operativa y eficiencia energética, adaptándose a diferentes volúmenes de producción sin desperdicio de recursos.

Qué Hace: El homogeneizador puede operar tanto de manera manual como automatizada a través de un PLC, registrando datos clave del proceso (presión, temperatura, tiempo de operación).

Beneficio: Asegura una mayor flexibilidad operativa y facilita la trazabilidad del proceso, permitiendo ajustes precisos y análisis para futuras mejoras.

Qué Hace: Ofrece un diseño intuitivo y accesible con espacio independiente entre pistones para un mantenimiento rápido y sencillo.

Beneficio: Minimiza el tiempo de inactividad del equipo y reduce significativamente el tiempo y costo de mantenimiento, asegurando una operatividad continua.

Qué Hace: Detecta burbujas de aire en el sistema, desconectando automáticamente la presión de homogeneización para evitar daños en el equipo.

Beneficio: Protege las cabezas de homogeneización (las partes más caras del equipo), prolongando la vida útil del homogeneizador y evitando reparaciones costosas.